El petróleo de la Lora. La esperanza que surgió del frío
Obra colectiva. Coordinador: Miguel Moreno Gallo
Burgos, 2007
ISBN: 978-84-96606-12-8
208 páginas a todo color
28,00 € 
  Los Autores

BENITO DEL CASTILLO GARCÍA. Catedrático de Química Analítica, decano de la Facultad de Farmacia de la Universidad Complutense de Madrid.

CARLOS PALMA BARCENILLA. Naturalista, coautor del Altas de las Aves Nidificantes de la Provincia de Burgos. Socio de SEO/Birdlife.

CARLOS SAINZ VARONA. Ingeniero técnico de Obras Públicas e Industrial. Coleccionista de Fotografía Histórica.

EDUARDO DE JUANA ARANZANA. Profesor de Zoología de la Facultad de Biología de la Universidad Complutense de Madrid y presidente de SEO/Bird Life.

ELÍAS RUBIO MARCOS. Escritor y editor.

FERNANDO DÍEZ GONZÁLEZ. Dibujante.

FRANCISCO JAVIER AYALA CARCEDO. Doctor en Ingeniería Geológica e ingeniero de Minas, investigador del Instituto Geológico y Minero de España; profesor de la Universidad Politécnica de Madrid.

FRANCISCO JAVIER PUERTO. Catedrático de Historia de la Farmacia de la Universidad Complutense de Madrid.

FRAY VALENTÍN DE LA CRUZ. Doctor en Historia. Cronista oficial de la Provincia de Burgos.

GONZALO MARTÍNEZ DÍEZ. Catedrático emérito de Historia del Derecho.

JOSÉ MARÍA MANJÓN. Pedagogo y doctorando de la Universidad de Burgos.

LUIS ISMAEL ORTEGA. Geólogo. Artista.

MARTÍN LÓPEZ. Mitólogo.

MIGUEL MORENO GALLO. Profesor de Comunicación Audiovisual de la Universidad de Burgos. Licenciado en Ciencias de la Información y en Geografía e Historia. Doctor en Prehistoria.

MONTSERRAT GUTIÉRREZ BUSTILLO. Profesora de Botánica de la Facultad de Farmacia de la Universidad Complutense de Madrid.

SALVADOR MIRETE MAYO. Geólogo, catedrático de Ciencias Naturales.

En junio de 1964 brotó petróleo en el páramo de la Lora. Por fin se veían recompensados los trabajos de prospección que se habían llevado a cabo en España durante todo el siglo XX, sobre todo desde el final de la Guerra Civil.

Desgraciadamente, el crudo era escaso y de mala calidad, lo que terminó frustrando las esperanzas de las autoridades, de las empresas y, por supuesto, de los habitantes de Sargentes, de Ayoluengo y de Valdeajos. Cuarenta años después, continúa la explotación del campo petrolífero, pero ahora es tan sólo un recuerdo de lo que pudo ser.

Sin embargo, La Lora atesora una interesante naturaleza, una historia cargada de acontecimientos y una belleza paisajística que nos invitan a recorrer la comarca con los ojos bien abiertos, con el espíritu dispuesto para contemplar la fauna, la flora y la presencia humana de un territorio que parece inhóspito, pero que sorprende al viajero en cada recodo del camino.